1. Ten paciencia contigo mismo
Nacido en 1879 en Ulm, Alemania, en una familia judÃa, Albert Einstein no es exactamente el niño más precoz. Empieza a hablar a la edad de 3 años, por lo que se sospecha que tiene una discapacidad mental. En 1895 se inscribe en el examen de admisión del Instituto Politécnico Federal, pero no lo supera. Un año más tarde es admitido en el Instituto, y en 1900 termina sus estudios, pero su solicitud de ser nombrado asistente universitario es denegada.
Mientras busca trabajo, publica su primer estudio cientÃfico. Aunque trabaja como profesor sustituto, comienza a preparar una tesis doctoral al mismo tiempo. Finalmente, en 1902 obtiene un puesto temporal como experto técnico, en la Oficina de Patentes de Berna. Publica su tesis doctoral y recibe su doctorado (1905-1906) y publica otros tres importantes artÃculos cientÃficos. En 1909 ya es nombrado profesor de fÃsica en la Universidad de Zurich.
Como podemos ver, incluso el gran Einstein tenÃa las puertas cerradas delante de él por otros. Se tomó el tiempo para abrirlas por su cuenta. ¿Qué habrÃa pasado si se hubiera desanimado por el fracaso de un examen de admisión o el rechazo de los que podrÃan haberlo contratado? ¿O qué hubiera pasado si su orgullo, herido por todos al negar su brillantez, lo hubiera empujado más abajo en un abismo de frustración y abandono?
¿Qué podemos aprender de su vida? Paciencia, perseverancia y confianza. ¡Pronto llegará su hora!
2. Elija lo esencial. No pierdas tu tiempo con cosas irrelevantes
Basándose en su propia experiencia, la recomendación de Einstein para nosotros es aprender a entender lo fundamental para nuestra vida personal y dejar atrás todo lo demás de la multitud de cosas alucinantes. En otras palabras, ten cuidado en cómo pasas tu tiempo. No nos damos cuenta de lo limitado que es nuestro tiempo. Además, sólo podemos brillar en ciertas áreas. Si no nos fijamos objetivos especÃficos y no nos centramos en lo que realmente importa, no llegaremos a ninguna parte.
3. Sé honesto contigo mismo.
La mayorÃa de las veces, la gente tiende a ser demasiado confiada o insegura. Es difÃcil mantener una imagen equilibrada de sà mismo. Einstein conocÃa tanto sus talentos como sus limitaciones, y no se avergonzaba de admitirlo.
4. Sé valiente para pensar por ti mismo.
Si quieres innovar, tienes que repensar todo. Puede que no consigas el rendimiento de revolucionar un dominio entero, como hizo Einstein con la FÃsica. Sin embargo, una mente analÃtica es esencial para nuestro desarrollo personal.
5. Construye tu futuro
Aunque ciertamente bendecido con grandes habilidades mentales, Einstein no ganó sus batallas sin esfuerzo. Incluso habla de algunas buenas ideas obtenidas después de «muchos años de trabajo febril». Se dice que publicó alrededor de 300 artÃculos cientÃficos. Además, fue honesto acerca de no tener la mejor memoria, teniendo serios problemas para recordar los nombres de las personas que conocÃa o su propio número de teléfono. En otras palabras, tuvo que trabajar duro y poner mucho esfuerzo en superar sus lÃmites.
¿Quieres lograr algo? Entonces no esperes a que las cosas sucedan milagrosamente, ¡ponte a trabajar en tus ideas! ¡La perseverancia y la tenacidad son las claves del éxito!
Autor: Youth Alive, un programa diseñado para desarrollar la resiliencia entre los adolescentes y los adultos jóvenes, equipándolos para que tomen decisiones saludables. A través del programa Youth Alive, los adolescentes pueden comprender mejor sus dones y su propósito.
PUBLICACIÓN ORIGINAL: Cinco lecciones a aprender de Albert Einstein